SEMANA DE ADVIENTO

Queridas/os Miembros y Dirigentes:
Llega la Navidad, y en nombre de todo el Consejo Arquidiocesano y de las distintas Áreas y Equipos de la Acción Católica de Buenos Aires, queremos celebrar este tiempo de gracia, junto a Uds. y sus familias.
En este año tan especial de Pandemia que nos ha tocado transitar, que tanto dolor ha producido, que nos limitó en nuestras tareas pastorales, encuentros, misiones y celebraciones eucarísticas, agradecemos a todos Uds. que han seguido con nuestra labor como Acción Católica, pese a las dificultades, y a las lógicas precauciones.
En esta época que nos toca vivir, reconocer la dignidad de cada persona humano y hacer que el sufrimiento no se nos hace ajenos, nos insta a acercarnos y acompañar en el dolor al hermano y ayudarlo a cargar su cruz. Nadie puede pelear la vida aislado.
EL Papa Francisco nos recordó que estamos en el mismo barco, que no estamos solos, y que no podemos dejarnos ganar por la desesperanza. Jesucristo el Señor de la historia, el que se encarnó de María Virgen, está hoy y ahora, a nuestro lado nuestro guiándonos en este camino. ¡Él es nuestra Esperanza y nuestra Alegría!
El pesebre nos muestra que Él nunca se impone con la fuerza tal como nos dice el Papa. Para salvarnos no ha cambiado la historia con un milagro grandioso, ha venido con gran sencillez, humildad y mansedumbre.
Dios no ama, y se hace pequeño, se hace niño, para atraernos con amor, para tocar nuestros corazones con su humilde bondad; para conmover con su pobreza a quienes se esfuerzan por acumular los falsos tesoros de este mundo.
El tiempo en que vivimos nos atravesó a todos por igual, nos lastima y nos dice que el remedio es construir un nosotros, cercanos y atentos al otro, en definitiva, una comunidad con la mirada puesta en ese pesebre humilde que nos sostenga en lo sencillo, cada uno con sus talentos. El mismo pesebre nos enseña que debemos salir al encuentro de aquellos que más sufren, que más necesitan de Aquel que nos trae la paz y la esperanza.
Hermanos, tomando el ejemplo de María que con su sí aceptó e hizo carne la voluntad del Padre, queremos hacer eco las palabras del Papa Francisco: “Esta fe y esperanza en el mundo encontró tal vez su más gloriosa y suscinta expresión en pocas palabras que en los evangelios anuncian la gran alegría: Les ha nacido hoy un Salvador” ¡Muy Feliz y Santa Navidad!

Consejo Arquidiocesano de Buenos Aires